Es uno de los agentes de extinción de incendios preferidos para la protección de los espacios de las embarcaciones en donde la tripulación u otros ocupantes pudieran estar presentes.
Aprobado por las principales agencias reguladoras tales como UL, USCG, y LRS, para su uso en aplicaciones marinas tales como espacios de máquinas y en áreas de almacenamiento de líquidos inflamables.
El sistema en conjunto pesa menos y ocupa menos espacio que los sistemas a base de dióxido de carbono, o que los sistemas de nebulización de agua, por lo que ofrecen soluciones más eficientes para la protección contra incendios en buques, proveyéndoles de más espacio para carga o pasajeros.